Acadia y la Costa de Maine en Columbus Day

Maine es uno de mis estados preferidos para pasar el día haciendo alguna excursión desde Boston y por supuesto, también para disfrutar de unos días de vacaciones.

Otra de las muchas ventajas de vivir en Massachusetts es poder tener tan cerca Maine, un estado que es conocido como Vacationland, la tierra de las vacaciones es fiel a su apodo.

Sus pueblos costeros me tienen enamorada durante el verano y la primavera, pero si hay una estación en la que me ha ganado por completo, ha sido la de otoño.

Maine en mi opinión es sinónimo de naturaleza, de gastronomía, especialmente mariscos y de relax, paz y tranquilidad.

Es un estado ideal para dejarse llevar por sus paisajes y largas carreteras, sin destinos fijados, solo disfrutando de las rutas escénicas que nos vamos encontrando.

Ir haciendo paradas en los lugares que nos llamen más la atención, inspeccionar la zona y volver a la ruta hasta que decidamos volver a parar.

He tenido la suerte de poder disfrutar de días así, días de excursiones por este estado en el que siempre terminábamos volviendo a casa de madrugada y con ganas de más.

Aparcar en Arlington

Hace años ya había compartido una entrada sobre cómo poder aparcar en la ciudad de Cambridge, la ciudad en la que he vivido desde que llegué al país hasta hace dos meses, es decir durante los últimos siete años.

🚘  Aparcar en Cambridge

Durante estos siete años y aunque obviamente conozco mejor Cambridge y Boston, también me he movido bastante por las ciudades de los alrededores de Boston, los conocidos como suburbs.

Y aquí hago un inciso para comentar que aunque la palabra suburbios se escribe de un modo muy similar a la inglesa suburbs, ambas palabras tienen un significado muy diferente.

Mientras que para nosotros los suburbios son los barrios marginales, ya sean a las afueras o en el interior de las ciudades, aquí no tienen esa connotación peyorativa y los suburbs son áreas residenciales de clases medias o altas en las que cuentan con más zonas verdes y más tranquilidad.

Las típicas ciudades que vemos en las películas americanas en las que viven las familias con niños y perros y que cuentan con jardines en los que siempre están haciendo barbacoas.

Harriet Beecher Stowe: La Cabaña del Tío Tom

Nueva Inglaterra es conocida por muchos aspectos y uno de ellos es la cantidad de autores, muchos de los nombres más importantes de la literatura estadounidense, que nacieron y/o vivieron sus vidas en esta zona de Estados Unidos.

Muchos de ellos son tan conocidos que incluso alguien con poco conocimiento literario estadounidense, puede identificarlos a ellos o alguna de sus obras, como es el caso de esta autora, Harriet Beecher Stowe.

Al igual que yo, es probable que algunos de vosotros nunca hayáis oído hablar de ella o al menos no recordéis su nombre, pero quién puede decir que no conoce o ha escuchado hablar de su obra maestra, "La Cabaña del Tío Tom".

Esta novela fue la más vendida del siglo XIX y también el segundo libro, solo por detrás de la Biblia, lo que le hizo ganar fama mundialmente.

Harriet Elisabeth Beecher nació el 14 de junio de 1811 en Litchfield, una población cercana a Hartford en Connecticut.

Era hija de Lyman Beecher, un conocido ministro presbiteriano educado en la Universidad de Yale y la sexta hija que tuvo con su primera mujer, Roxana.

Su madre murió cuando Harriet tenía 5 años y su padre se volvió casar pronto, añadiendo más hijos a la familia, en total fueron 11 los que sobrevivieron a la edad adulta.

John Brown House Museum en Providence, Rhode Island

El pequeño estado de Rhode Island es conocido por las impresionantes mansiones de Newport. Allí se alojaron durante los veranos, las familias más ricas e influyentes del país en la Edad Dorada de Estados Unidos.

Sin embargo, las mansiones de Newport no son las únicas de importancia histórica en Rhode Island. En otras ciudades como Bristol y su capital, Providence, también hay algunos ejemplos de estas mansiones, de diferentes épocas y estilos, pero que nos ayudan a conocer y entender mejor la historia de este país.

Probablemente no conozcáis a John Brown, un ciudadano de Providence, uno de los más ricos del país en su época, aunque seguro que su apellido os puede sonar familiar, gracias a la Universidad de Brown.