Segunda visita a un restaurante, de los participantes en la
Dine Out Boston en su edición de marzo 2.014. En esta ocasión nos decidimos por uno de los restaurantes ubicados en
Cambridge, en la zona de
Harvard Square.
Aunque
Toscano cuenta con dos ubicaciones, una en
Beacon Hill, la más antigua y la que nosotros visitamos en
la zona de
Harvard de apertura reciente.
🍝 http://www.toscanoboston.com/harvard-square
Aparte de la ubicación inmejorable, sobre todo para nosotros que vivimos en el barrio, el decorado del restaurante es elegante y con elementos artesanales como grandes puertas de madera talladas a mano, paredes con ladrillos de piedra antigua y candelabros pintados en colores cálidos, que crean una atmósfera de relajación.
El restaurante cuenta con un comedor privado como el que vemos al fondo en la imagen anterior y otro, el que nos encontrábamos nosotros, aparte de la zona de la barra que cuenta también con algunas mesas más informales.
Con mesas amplias, sillas cómodas y suficiente espacio entre las mesas de blancos e impolutos manteles que dan aun más sensación de limpieza tal y como se puede apreciar en las fotos. Pero además con un servicio correcto, pausado, para dejar saborear la comida sin prisas, pero sin eternas esperas. Con detalles, como la recogida de las migas de la mesa antes de colocar los postres, que llevaba mucho tiempo sin ver. Todo muy parecido al clásico servicio en
España, cada plato marcado con su correspondiente cubierto!!!! Esas pequeñas cositas que una aprendió en la escuela de hostelería y que le parece que fue la única en casi cada visita a un restaurante americano...
El
menú para
almuerzos es de
tres platos por
$20 más tasas, bebidas y propinas. Hay que elegir un plato de entre los entrantes, los platos principales y los postres. Las opciones son las siguientes:
Entrantes
- Salmone Affumicato
Foley Smoked Salmon • Crostini • Lemon • Caper Berries
- Polpettini Fiorentina
Veal-Beef-Pork Meatballs • Florentine Style
- Zuppa Minestrone
Classic Tuscan Style Vegetable Soup
- Insalata Cesare
Romaine Hearts - Focaccia Croutons - Classic Dressing
- Barbine Rosse
Red Beets • Gorgonzola Dolci • Lemon • Olive Oil
Platos Principales
- Orcchiette Vitello
Ground Veal • Mushrooms • Tomato
- Rigatoni Norcina
Homemade Ground Sausage • Black Truffle Cream Purea
- Scaloppini Pizzaiola
Veal Scaloppini • Tomato • Fresh Mozzarella • Oregano • Patate al Forno
- Pollo Toscano
Sautéed Chicken Breast • Fresh Porcini • Tomato • Patate al Forno
- Sirloin Tutto Pepe
Pepper Crusted Brandt Beef Sirloin • Brandy Cream • Patate al Forno
- Salmone al Forno
Oven Roasted Salmon • Sauteed Spinach • Olive Oil / Garlic
Postres
- Tiramisu Toscano House Specialty “Budino Style”
- Crostata Di Albicocca Homemade Apricot Tart - Vanilla Gelato
- Gelato e Sorbeto Del Giorno
En cuanto a la cantidad de comida, como de costumbre y a pesar de ser al medio día (se supone la comida menos fuerte en la cultura americana, aunque en la que nosotros acostumbramos a comer más y por lo tanto podemos abusar un poco más en las cantidades) era demasiada para nosotros.
Usualmente en los restaurantes americanos suelen poner un poco de pan y mantequilla, en esta ocasión al igual que en España nos trajeron un poco de pan y aceite de oliva.
Otro de los detalles a los que no estamos acostumbrados fue que nos ofrecieran tomar café, no me gusta beber café y después de tanta cantidad de comida no sería capaz ni de un simple trago de agua, pero es algo que no se suele ofrecer tras una comida en los restaurantes de Boston.
En cuanto a las bebidas, aunque no están incluidas en el precio del menú, sólo el agua, tienen un descuento en las botellas de vino.
Nuestras elecciones fueron:
Un plato con salmón ahumado y alcaparras con tostadas de pan y un poco de aceite de oliva. Creo que no hay mucho más que decir del plato, sencillo, sabroso pero quizás bastante común.
Albóndigas con tomate. Este plato no pude probarlo porque lleva queso, aunque no recibió quejas.
Solomillo de ternera con salsa de brandy y patatas al horno. El solomillo estaba en su punto, jugoso y sabroso. La salsa de brandy con pimienta estaba muy buena de sabor, aunque para mi gusto le faltaba un poco de consistencia, ya que estaba un poco líquida de más. Las patatas como se puede apreciar en la foto estaban un poco negras, pero tampoco afectaban demasiado al sabor. En general el pato estaba muy bueno con pequeños detalles mejorables, pero que sin los cuales tan poco me importaría repetir, sinceramente.
Salmón al horno acompañado de espinacas. Está bueno si te gusta el salmón al horno, pero así de simple tal y como vemos en la foto, una buena pieza de lomo de salmón sin más acompañamiento que una rodaja de limón y una buena montaña de espinacas. ¡Ah! sin olvidar la ramita de perejil que acompaña a cada plato y que no digáis que no es Arguiñano 100%.
Una copa con tiramisú que no pude probar por el queso, pero que tenía muy buena pinta.
Y una tarta de albaricoque con helado de vainilla.
Mi opinión personal respecto al sabor es que los platos estaban buenos, pero supongo que debido a nuestras similares culturas mediterráneas y que los platos tampoco es que fueran unos grandes desconocidos para la cocina española, no consiguieron que encontrara ese punto de sorpresa y de diferencia que buscaba. Algo que hiciera una experiencia única y atípica de cualquier almuerzo diario en casa.
A pesar de ello creo que es una buena opción y segura para cualquier ocasión en la que busquemos más algo de sabor habitual, pero de calidad y sin tener que meternos en la cocina.
También tienen
menú de cena, como suele ser habitual más caro y completo que el del almuerzo, en este caso a
$33 más tasas, bebidas y propina.
Aunque todo el mundo no sea tan torpe como yo, aconsejo mirar bien antes de hacer la reserva desde el móvil porque aunque yo juraría que vi el de Harvard Square, hice la reserva sin querer en el de Beacon Hill!!! ;)