
Níjar es el municipio más grande en extensión de la provincia de Almería y también el cuarto con mayor población, muy conocido por sus playas vírgenes entre las que además de varias calas y hay varias de las playas más reconocidas y apreciadas de España como la Playa de los Genoveses, Playa de Mónsul o el Playazo de Rodalquilar.
A pesar de eso Níjar no solo es sol, buceo y relax en la playa, aquí también podemos disfrutar de un turismo diferente, menos conocido, pero muy interesante, en el que además de lo anterior podemos incluir la visita a castillos, torres, un molino y hasta un acueducto.
Muchas opciones diferentes sin salir de un solo municipio que además se encuentra a menos de 30 minutos en coche desde la capital almeriense y muy cerca del aeropuerto de esta provincia.
Entre todas las opciones nosotros decidimos pasar un día de excursión tranquilo, de relax, pero no de playa, visitando algunas de sus atracciones históricas, disfrutando de sus gastronomía y paseando por dos de sus pedanías más pintorescas.
No es todo lo que hay, pero es suficiente para pasar un día completo, que además puede mejorar al incluir unas horas en algunas de sus espectaculares playas.
Cortijo del Fraile

Nuestra primera parada fue para ver las ruinas del Cortijo del Fraile y como este sitio histórico está desapareciendo poco a poco sin que nadie lo remedie, le he dedicado una entrada individual, porque no sabemos cuánto más durará en pie.

Podéis leer esta entrada para conocer más sobre la historia de este histórico cortijo pinchando en el siguiente enlace: