Texas Fair Park en Dallas

Al este del centro de Dallas se encuentra uno de los mayores complejos de instalaciones culturales, deportivas y salas de exhibiciones del sudeste de Estados Unidos, además de ser la única feria mundial previa a 1950 que se conserva intacta y sin alteraciones de todo el país.

Desde 1886 allí se celebraba la Feria Estatal de Dallas (Dallas State Fair), a la que acudían agricultores y artesanos de todo el estado a vender y promocionar sus productos. Se celebraban concursos y se organizaban varias atracciones para los visitantes como musicales...

Después de atravesar por un periodo de decadencia en el que bajaron las ganancias y enfrentaron problemas como incendios, fue vendida finalmente en el año 1904.

Tras esos años, vivió su época de mayor esplendor en 1936, debido a que fue el lugar elegido como sede para la celebración del Centenario de Texas, consiguiendo reunir a más de 7 millones de visitantes.

George Dahl, un ex-estudiante de Harvard, fue el arquitecto que se encargó de renovar las estructuras existentes antes de la Exposición del Centenario de Texas y también el que construyó los nuevos edificios. Consiguiendo crear uno de los lugares más significativos del mundo de la arquitectura Art Déco.

Debido a su importancia histórica para el estado de Texas, en 1986 fue declarado Monumento Histórico Nacional.

Invierno del 2017 en Boston

Este invierno que acabamos de pasar ha sido bastante variado, pero tirando a flojo de nieve y también de bajas temperaturas.

Comenzó con una primera tormenta de nieve el día 7 de enero, pero no fue nada destacable. Las temperaturas tampoco eran demasiado bajas, nada fuera de lo normal en un invierno de Boston.

Después febrero llegó algo más loco de lo usual, aunque comenzó haciendo frío y con algunas nevadas leves, como la del día en la que se celebró la Super Bowl que ganaron los Patriots, después llegó el desconcierto total.

Este año la marmota acertó, ya que predijo seis semanas más de invierno durante el Groundhog Day que se celebró el día 2 de febrero.

El día 9 llegó la tormenta Niko y se declaró la primera emergencia del año por tormenta de nieve.

¡Fijaros en los mensajes que se podían leer en los autobuses de Harvard!! 😜  "Think Spring"

No fue nada espectacular, aunque lo suficiente para que se cancelaran los colegios, bibliotecas, citas del hospital y que mucha gente se quedara a trabajar desde casa.

Al menos nos dejó imágenes bonitas de la ciudad que al menos yo ya echaba de menos.

Seguro que a alguno esta imagen no le hace tanta gracia.

Para que no os pase, es mejor estar dado de alta en el sistema de emergencias de vuestra ciudad. Yo ya he compartido el enlace del de la ciudad de Cambridge varias veces en el blog y en la página del blog en Facebook.

Fin de Semana Gastronómico en Nueva York

En nuestro último viaje a Nueva York disfrutamos más relajados de la ciudad, sin las prisas por ver los monumentos o puntos más destacados, ya que los habíamos visitado todos en varias ocasiones.

Tuvimos más tiempo para disfrutar de la gastronomía de la ciudad y buscar lo que nos apetecía probar, sin pensar mucho si se encontraba en algún lugar cercano o de camino hacía nuestro destino. Así que dirigimos nuestros paseos en función de la comida.

Una de las ventajas de Nueva York es que es una ciudad con una oferta gastronómica inmensa y tan multicultural, que es casi imposible no encontrar cualquier cosa. Allí hay casi de todo y eso es una gran ventaja, pero también puede suponer un gran dilema a la hora de decidirse.

Ya he escrito varias opiniones sobre locales de restauración de Nueva York. Podéis leerlas en las entradas que he ido escribiendo en cada una de las visitas que hemos ido realizando a esta ciudad.

Y específicamente también le dediqué una entrada a algunas de esas opciones:

🍴  Gastronomía en Nuestro Fin de Semana en Nueva York

En esta última ocasión, aunque hemos repetido en uno de los establecimientos hosteleros, también hemos probado otras nuevas opciones que quiero compartir con vosotros.

Esta fue nuestra selección durante nuestro último fin de semana en Nueva York.

Bibble & Sip

Encontramos esta pequeña joya gastronómica durante uno de nuestros desayunos a media mañana y hubiésemos repetido encantados, de no ser porque durante el fin de semana no abren hasta las 10:00 am. y a esa hora ya es un poco tarde para desayunar.

📍  Se encuentra en el centro de la ciudad de Nueva York en:

253 West 51 Street
New York 

Es una pequeña cafetería ideal para desayunar o para merendar, aunque es muy pequeña. Sólo hay unas cuantas mesitas con pocas sillas y una barra y por lo que vimos suele estar muy concurrida, aunque nosotros tuvimos suerte y nos hicimos con una de las mesitas.

Todos sus pasteles y bollos están hechos artesanalmente, incluso los ingredientes como las nubes que usan en el chocolate caliente o los siropes de sus bebidas.

No hay una selección de pastelería demasiado extensa, pero todo tenía una pinta de estar realmente exquisito. Además, toda su repostería está elaborada con técnica francesa, pero con sabores típicos de los dulces asiáticos.

Nosotros probamos sólo dos piezas y las dos estaban deliciosas, ambas con unos sabores muy originales. Además, nuestras elecciones eran de bollería hojaldrada y en estas piezas se nota especialmente la buena calidad de los ingredientes y un buen trabajo artesano.

Matcha Red Bean Danish $4,36

Black Sesame Almond Croissant $4.75

Para beber, aunque los dos queríamos pedir el Matcha Jasmine Latte $4.75, decidimos pedir sólo uno y otra cosa diferente para probar.

El matcha estaba muy bueno, aunque no me gustó que me lo sirvieran en un vaso de papel a pesar de que no era para llevar. Al parecer, no tienen suficientes tazas, algo que por los precios que tienen, deberían de solucionar.

Viaje de Fin de Semana a Nueva York

El último puente que tuvimos en Estados Unidos, Presidents' Day, nos tocó libre y como eso es algo que no se repite muy frecuentemente, decidimos escaparnos unos días y descansar de la rutina.

Después de barajar varias opciones que no cuadraban, nos decidimos por una escapada a Nueva York a última hora y sin nada planeado.

Esa es una de las ventajas que tenemos en Boston, la Gran Manzana está lo suficientemente cerca como para visitarla de vez en cuando, sin tener que vivir allí. Yo no cambiaría Boston por Nueva York nunca.

Digamos que esta era nuestra última opción, pero la más sencilla de todas.

Este invierno está siendo muy suave y casi ni hemos visto la nieve, a no ser por esos días de mediados de febrero en los que tuvimos tres tormentas de nieve seguidas. Así que teniendo muy en cuenta el clima, ya que no nos apetece salir de puente y encontrarnos en medio de una tormenta, decidimos dejar todo para última hora.

Por el transporte no había problema, porque siempre vamos a Nueva York en nuestro coche. Los precios de los trenes son muy elevados y más en puentes y a última hora. No me apetece nada ir en bus y tener que adaptarme a sus horarios y los vuelos son baratos si los reservas con antelación, pero pasar controles, ir al aeropuerto... me quitan las ganas para sólo tres días.

Como siempre vamos en fin de semana, siempre aparcamos en la calle y sin pagar. Aunque en esta última ocasión no tuvimos tanta suerte y el primer día después de unas cuantas vueltas, decidimos que era mejor meter el coche en un parking, el del hotel. A la mañana siguiente ya lo dejamos aparcado en la calle, sin problemas, como siempre.

En cuanto al alojamiento, normalmente cuando vamos con más gente siempre reservamos un apartamento con airbnb, pero cuando vamos los dos solos, solemos reservar una habitación de hotel.