
La primera Central Nuclear se construyó en el año 1954 en la antigua URSS y durante los siguientes años fueron construyéndose por otros países hasta llegar a más de 400 a finales de los ochenta.
Pueden producir una gran cantidad de energía eléctrica, sin causar el efecto invernadero que producen el uso de combustibles fósiles, pero generan residuos nucleares y a lo largo de la historia han causado un preocupante número de accidentes, en su mayoría debido a fallos humanos.

Todos hemos oído noticias de accidentes en centrales nucleares, entre ellos los más conocidos son el de Chernóbil en Ucrania, el accidente nuclear más grave de la historia que tuvo lugar en abril del 1986 o más recientemente en marzo del 2011 el de Fukushima en Japón.
Y si bien son los más conocidos, definitivamente no son los únicos accidentes nucleares, incluso en España sufrimos uno en el año 1989 en Vandellós, Tarragona que afortunadamente no causó víctimas.
En Estados Unidos también tuvo lugar uno de los más graves de la historia, en marzo de 1979 en Three Mile Island, Pensilvania.
En la actualidad hay un total de 442 centrales nucleares repartidas por 31 países, entre ellos Estados Unidos, el país con el mayor número a nivel mundial.
En total en Estados Unidos hay actualmente 96 reactores nucleares comerciales en funcionamiento en 58 plantas nucleares repartidas por 29 estados.