El santuario Meiji o Meiji Jingu, construido en 1920 como monumento conmemorativo del espíritu divino del emperador Meiji y su mujer la emperatriz Shoken, es uno de los santuarios más importantes y visitados de Japón.
El emperador Meiji, el número 122 y bisabuelo del actual, es conocido como el emperador que comenzó la modernización de Japón, iniciando un periodo de industrialización, crecimiento y el fin del sistema feudal y de su aislamiento como nación, estableciendo relaciones internacionales e introduciendo desarrollos tecnológicos extranjeros a la vez que conservó la identidad nacional.
Falleció en 1912, dos años antes que su mujer, aunque ambos están enterrados en Kioto realmente y no en este santuario, como se podría pensar, al ser un santuario construido tras su muerte para venerarlos.
Este santuario, como todos los denominados así en Japón, procesan la religión sintoísta, la religión original o autóctona de Japón.