
En nuestra quinta Noche Vieja consecutiva en Boston, hemos consolidando las nuevas tradiciones familiares, disfrutando de la gastronomía que nos ofrece esta parte del mundo y también hemos aprovechado para descansar.
Este año las Navidades han llegado con temperaturas bastante suaves, similares a las del año pasado. Especialmente en Noche Vieja, que apenas hizo nada de frío, aunque la lluvia nos aguara la uvas, las americanas.
Las uvas nos las tomamos realmente y también por quinto año consecutivo a las 6 de la tarde, hora de Boston, que son las 12 de la noche en España.
Como no tenemos tele, buscamos alguna cadena española en el ordenador y nos las comemos y vemos las campanadas en la casa.
Después hablamos con las familias y nos ponemos a cenar inmediatamente. Es la única cena del año que hacemos en horario, más o menos, americano.
Las uvas nos las tomamos realmente y también por quinto año consecutivo a las 6 de la tarde, hora de Boston, que son las 12 de la noche en España.



Como no tenemos tele, buscamos alguna cadena española en el ordenador y nos las comemos y vemos las campanadas en la casa.


Después hablamos con las familias y nos ponemos a cenar inmediatamente. Es la única cena del año que hacemos en horario, más o menos, americano.
Nuestra cena volvió a ser en casa, y para esta ocasión parece que aprendí un poco la lección y no me lié a preparar tanta comida. Sólo un primero, un segundo y aunque preparé todo para hacer el postre, al final no lo hice.
No me lié mucho buscando tampoco, fui a un Whole Foods, no me gustó nada de lo que había, así que fui a otro de los Whole Foods que hay cerca de casa y allí encontré más opciones. Esa es la ventaja o inconveniente que tenemos por aquí, ni siquiera los supermercados de la misma cadena tienen los mismos productos.
Compré un cangrejo Dungeness, es la primera vez que los veo por aquí, aunque ya lo habíamos probado durante nuestros viajes a San Francisco y sabíamos que están exquisitos. No obstante, gastronómicamente están considerados como uno de los mariscos más selectos y sabrosos del mundo.

Esta especie de cangrejo es más grande que los que suelo encontrar por Nueva Inglaterra, tiene una carne dulce y es autóctono de la Costa Oeste de Estados Unidos.

Como curiosidad decir que a menudo representa al signo cáncer. ¡Mi signo del zodiaco! ♋
Ya estaba cocinado y listo para comer o preparar cualquier receta con él, por lo que fue una opción para un primer plato delicioso y sencillo.
Yo lo preparé con una salsa de cítricos con ajos y guindillas al horno y quedó para chuparse los dedos! Literalmente 😋 😝

Yo lo preparé con una salsa de cítricos con ajos y guindillas al horno y quedó para chuparse los dedos! Literalmente 😋 😝

Para separar el primero del segundo, que en esta ocasión fue carne, serví un sorbete de mango.
Para el segundo compré la mejor pieza de carne que encontré, además tuve suerte de que fuese pequeña, así no tarda tanto en prepararse y no nos sobra tanto. Aunque casi que se nos quedó entera para comer el día de Año Nuevo.
Es una de las piezas de ternera que más me gustan de las que he encontrado por los supermercados de aquí, la Beef Standing Rib Roast y la he preparado de forma similar a como la hice el año pasado por Navidad, ya que nos gustó mucho a los dos.
Cubierta con mostaza, un majado de ajos y tomillo, estaba muy jugosa y sabrosa.
Este año he conseguido que no quede tan hecha como el año pasado, aún así, quizá con un poco menos de cocción quede mejor. De todas formas, no tenía sangre, pero estaba roja por dentro.
Lo que me ha gustado menos ha sido el puré de patatas, estaba rico de sabor, pero la textura no era la que había conseguido otros años.
Estoy segura que la culpa ha sido de la variedad de patatas que he usado. Este año he intentado encontrar las Yukon Gold, que son las que mejores resultados me dan para el puré, pero no las he visto por ningún lado.
Para la cena de Noche Vieja he usado la misma vajilla de Navidad, aunque he cambiado el mantel por uno con más brillos y también la decoración.
Como había menos platos con comida, tenía más espacio libre en la mesa y la decoré con unas flores artificiales con brillantinas que tenía por casa en un jarrón que hice hace unos años. Para verlo podéis pinchar Aquí.
Usé también una vela, un camino de mesa dorado brillante, unas flores secas naturales y algunas pequeñas estrellas de adornos de Navidad y bolas que tenía del árbol.
Empecé a ponerlo todo y al final me gustó como quedó, ¿Qué os parece a vosotros mi decoración improvisada?
Creo que para el año que viene voy a repetir algo parecido, así que voy a buscar por las ofertas que hay ahora de adornos navideños, ya que suelen dejarlos tirados de precio.
La mesa montada y ya con la comida nos quedó así.
Después de cenar y cuando estábamos a punto de salir corriendo al metro, que por cierto, es gratis en Noche Vieja a partir de las 8 de la tarde, comenzó a llover, pero eso ya os lo cuento en la siguiente entrada, la de la First Night Boston 2017.
🎇 First Night Boston 2017
Mientras algunas fotos más de nuestra cena de Noche Vieja 2016.
Y ya estábamos listos para recibir por segunda vez al año 2017 😉


Para el segundo compré la mejor pieza de carne que encontré, además tuve suerte de que fuese pequeña, así no tarda tanto en prepararse y no nos sobra tanto. Aunque casi que se nos quedó entera para comer el día de Año Nuevo.

Es una de las piezas de ternera que más me gustan de las que he encontrado por los supermercados de aquí, la Beef Standing Rib Roast y la he preparado de forma similar a como la hice el año pasado por Navidad, ya que nos gustó mucho a los dos.

Cubierta con mostaza, un majado de ajos y tomillo, estaba muy jugosa y sabrosa.

Este año he conseguido que no quede tan hecha como el año pasado, aún así, quizá con un poco menos de cocción quede mejor. De todas formas, no tenía sangre, pero estaba roja por dentro.


Lo que me ha gustado menos ha sido el puré de patatas, estaba rico de sabor, pero la textura no era la que había conseguido otros años.


Estoy segura que la culpa ha sido de la variedad de patatas que he usado. Este año he intentado encontrar las Yukon Gold, que son las que mejores resultados me dan para el puré, pero no las he visto por ningún lado.

Para la cena de Noche Vieja he usado la misma vajilla de Navidad, aunque he cambiado el mantel por uno con más brillos y también la decoración.




Como había menos platos con comida, tenía más espacio libre en la mesa y la decoré con unas flores artificiales con brillantinas que tenía por casa en un jarrón que hice hace unos años. Para verlo podéis pinchar Aquí.


Usé también una vela, un camino de mesa dorado brillante, unas flores secas naturales y algunas pequeñas estrellas de adornos de Navidad y bolas que tenía del árbol.


Empecé a ponerlo todo y al final me gustó como quedó, ¿Qué os parece a vosotros mi decoración improvisada?


Creo que para el año que viene voy a repetir algo parecido, así que voy a buscar por las ofertas que hay ahora de adornos navideños, ya que suelen dejarlos tirados de precio.
La mesa montada y ya con la comida nos quedó así.




Después de cenar y cuando estábamos a punto de salir corriendo al metro, que por cierto, es gratis en Noche Vieja a partir de las 8 de la tarde, comenzó a llover, pero eso ya os lo cuento en la siguiente entrada, la de la First Night Boston 2017.
🎇 First Night Boston 2017
Mientras algunas fotos más de nuestra cena de Noche Vieja 2016.






Y ya estábamos listos para recibir por segunda vez al año 2017 😉
Seguro que será otro muy buen año. No me puedo creer que vosotros cenarais en horario americano. :D Aquí también he visto ahora ofertas de decoración navideña, al 50%.
ResponderEliminarBueno casi, sobre las 7 y el truco fue que desayunamos fuerte y tarde y nos saltamos el almuerzo :)
EliminarHoy quiero ir a mirar, pero no para de llover y yo quiero ir andando. Veremos a ver si nos las han quitado ya, que llevo tiempo viendo las ofertas de hasta el 70% y aquí cambiando todo rápido.