

Aprovechando que el domingo hizo buen día, decidimos ir paseando desde casa hasta Boston y pasar la tarde por Back Bay, así que nos venía perfecto que este restaurante se encontrase en este barrio, uno de los dos que más me gustan y suelo visitar de Boston.
406 Stuart St,
Boston, MA 02116

El local es muy grande, con dos plantas y varias zonas diferenciadas en cada una de ellas. La planta baja destaca por su gran barra y una chimenea entre el bar y las mesas.

Además también hay dos zonas de comedor diferenciadas y una pequeña sala privada.




Afortunadamente eso no fue ningún problema la otra noche porque al ser tan grande, aunque había gente, nos sentaron a todos a una buena distancia para poder disfrutar de algo de intimidad.


Además, algunos restaurantes no permiten que algunos comensales pidan el menú de la Dine Out y otros pidan a la carta en la misma mesa, así que para mí es obligatorio conocer el menú antes de hacer una reserva.
En este menú me llamó mucho la atención la variedad de opciones, sin ser un menú extenso, aunque algo más completo que la mayoría de los que participan, con cuatro opciones entre los entrantes y cuatro más entre los primeros.
Además en este menú encuentro platos sencillos y más comunes para mí como ensalada de cítricos o croquetas, junto con otros más novedosos como el acompañamiento de Spätzle, una pasta típica de Alemania, el Rillette, un tipo de paté de cerdo francés o la mostarda, una elaboración italiana realizada con frutas y mostaza.
Y técnicas que dan a estos platos un punto más excitante como las mousse de chirivía e hinojo que nos sorprendió gratamente por su delicioso sabor en la ensalada de cítricos.
Tampoco puedo olvidarme de la selección de vinos que acompañan al menú. Las bebidas no están incluidas en el precio, aunque algunos restaurantes aconsejan sobre el mejor maridaje para acompañar sus platos, como en esta ocasión.
En este menú me llamó mucho la atención la variedad de opciones, sin ser un menú extenso, aunque algo más completo que la mayoría de los que participan, con cuatro opciones entre los entrantes y cuatro más entre los primeros.

Además en este menú encuentro platos sencillos y más comunes para mí como ensalada de cítricos o croquetas, junto con otros más novedosos como el acompañamiento de Spätzle, una pasta típica de Alemania, el Rillette, un tipo de paté de cerdo francés o la mostarda, una elaboración italiana realizada con frutas y mostaza.
Y técnicas que dan a estos platos un punto más excitante como las mousse de chirivía e hinojo que nos sorprendió gratamente por su delicioso sabor en la ensalada de cítricos.
Tampoco puedo olvidarme de la selección de vinos que acompañan al menú. Las bebidas no están incluidas en el precio, aunque algunos restaurantes aconsejan sobre el mejor maridaje para acompañar sus platos, como en esta ocasión.
Yo soy abstemia y no bebo nada con alcohol, pero no puedo dejar de fijarme en que entre la selección internacional que han propuesto, se encuentran tres opciones españolas.
ENTRANTES
Toasted flax, poppy, pumpkin & sunflower seeds
Pork Rillettes Croquette
Apple & pear mostarda, spicy beer mustard, rojo cider reduction, daikon radish sprouts, lamb’s lettuce
Cacio E Pepe
Fresh spaghetti, wild mushrooms, cracked black pepper, pecorino romano
Winter Citrus Salad
Parsnip & fennel mousse, pickled zest, mâche, toasted cashews, tarragon vinaigrette
Ale steamed local clams, house-cured bacon lardon, yukon potatoes, confit leek, celery leaves
🍷 Verdejo, Oro de Castilla, Rueda, Spain 2015
Vanilla Brined Pork Loin
Pan fried spätzle, sautéed cabbage, apple butter, pickled mustard seeds
Slowly Braised Beef Cheek
Buttermilk biscuit, caramelized onion jam, collard greens
🍷 Tempranillo, Faustino, Rioja Reserva, Spain 2011
Red Lentil Shepherd’s Pie
Roasted broccoli, carrots & mushroom, cheddar chive mashed potatoes
Blood orange caramel, toasted coconut cream, blood orange supremes, coconut
🍷 Pedro Ximenez Sherry, Valdespino, El Candado, Jerez, Spain nv
Confetti Cake
Passionfruit curd, fresh raspberries, sweet & salty almonds
Junto con las bebidas nos sirvieron una cesta con dos bollos con forma de magdalena con sal que en realidad eran unos Butter Rolls, unos bollitos de mantequilla salados que sirven muchas veces en los restaurantes como si fuese pan.
Aunque sabía que me iban a llenar demasiado, no pude evitar terminarlo porque estaba muy bueno.
Este fue uno de los platos que más gratamente me sorprendió por sus diferentes texturas y explosión de sabores.
Como condimento este plato incluye dos salsas, una reducción de sidra y también mostaza picante de cerveza. Además, va acompañado por tres guarniciones típicas de cocinas internacionales. Una mostarda de peras y manzanas típica de la cocina italiana, unos brotes de rábanos daikon, el rábano blanco japonés y canónigos, una planta más usada en la cocina europea.
El nombre por el que nosotros lo conocemos en España, canónigos, se debe a que durante la Edad Media eran consumidos y cultivados por los clérigos cristianos en los conventos. Y no hacían nada mal consumiendo esta hierba rica en vitamina C, hierro, potasio o ácido fólico entre otros nutrientes.
Como platos principales nos decidimos por los dos de carne, el Vanilla Brined Pork Loin y el Slowly Braised Beef Cheek.
Ambos platos eran muy consistentes y los sirven con cantidad suficiente para ser un plato único. Nos gustaron los dos, pero ambos coincidimos en que el de ternera estaba mejor.
Otro plato consistente con pasta, carne y vegetales lo suficientemente grande como para ser un plato único.
En cuanto a los postres, la verdad es que por un lado me sorprende no encontrar la misma variedad y calidad en los postres en estos tipos de menús, que en sus entrantes o platos principales, pero por lo que he comprobado es algo común por aquí.
De todas formas nosotros no fuimos capaces de comer nada más y sólo pudimos ver la presentación una vez emplatados, probarlos un poco recién servidos y pedirlos para llevar.
Pedimos las dos opciones diferentes que ofrecían en el menú para poder probar ambas y dar una oportunidad a la Confetti Cake, ya que no es el tipo de tarta que nos gusta a ninguno de los dos.
Como anécdota fue divertido ver la cara de Fran cuando se la sirvieron a él y a mí me pusieron la de chocolate. Les dijimos que podían servir los platos a cualquiera de los dos porque íbamos a compartir todo a medias, así que a él le sirvieron la tarta de confetti y su cara de decepción fue monumental.
Ya la había pedido en la Cheesecake Factory una vez que fuimos a cenar con unas amigas y él se empeñó en no cenar nada más que la tarta. Cuando se la trajeron no se la pudo comer, no le gustó nada y se pilló una decepción enorme después de empeñarse él en ir allí, pedir la tarta que pensaba que era la mejor de una lista enorme de deliciosas tartas. Normalmente la compartimos siempre entre los dos y la elijo yo, así que esta era su primera elección y creo que la última.
En cuanto vio la tarta de confetti otra vez, no tardó en recordar la decepción que se llevó y decirme que no quería ver esa tarta en su plato nunca más, junto con algunas de sus ocurrencias que siempre me hacen imposible aguantar la risa 😂😂
La Carmelized Coconut & Chocolate Tart en principio era la que nos llamó más la atención a los dos, más por la parte del chocolate que es una de nuestras debilidades.
A pesar de ello y teniendo en cuenta que el postre no es algo secundario para mí, este restaurante con este menú, se ha convertido en uno de mis preferidos. Sin duda una muy recomendable opción de entre todos los que he probado hasta el momento, en todos estos años que llevo visitando los restaurantes que participan en la Boston Dine Out.
El servicio fue muy correcto en todo momento y rápido, aunque dejando algo de espacio necesario entre platos. El ambiente del restaurante era perfecto, aunque como siempre algo oscuro para las fotos, pero con la nueva cámara parece que salen bastante mejor en estas circunstancias.
Hablando de fotos, como otros años volví a intentar ganar el premio que ofrecen en Instagram a la foto con más ♡ para tener la oportunidad de visitar otro de estos restaurante gratis por una vez, ya que nunca me pagan o ofrecen nada a cambio de las críticas gastronómicas y toda la publicidad que les hago en el blog. Como siempre me quedé muy lejos de conseguirlo. La foto que ganó lo hizo con más de 200 y yo apenas llegué a los 50 🙈
Así que creo que me queda otra posible visita más a alguno de los restaurantes que participan este año y ya tengo decidido cual va a ser esa opción. Por supuesto, si voy, veréis mi crítica gastronómica también aquí en A mis 30 por Boston como siempre, sin espónsor y con opiniones personales, pero sinceras.
¿Qué os ha parecido este menú?. ¿Conocíais este restaurante?. ¿Tenéis pensado ir a alguno de los restaurantes que participan en este evento?. ¿Soléis participar en los concursos de internet?.
¡Podéis dejarme vuestras opciones, sugerencias y comentarios abajo y os responderé en cuanto las lea!.

ENTRANTES
Toasted flax, poppy, pumpkin & sunflower seeds
Pork Rillettes Croquette
Apple & pear mostarda, spicy beer mustard, rojo cider reduction, daikon radish sprouts, lamb’s lettuce
Cacio E Pepe
Fresh spaghetti, wild mushrooms, cracked black pepper, pecorino romano
Winter Citrus Salad
Parsnip & fennel mousse, pickled zest, mâche, toasted cashews, tarragon vinaigrette
Ale steamed local clams, house-cured bacon lardon, yukon potatoes, confit leek, celery leaves
🍷 Verdejo, Oro de Castilla, Rueda, Spain 2015
Vanilla Brined Pork Loin
Pan fried spätzle, sautéed cabbage, apple butter, pickled mustard seeds
Slowly Braised Beef Cheek
Buttermilk biscuit, caramelized onion jam, collard greens
🍷 Tempranillo, Faustino, Rioja Reserva, Spain 2011
Red Lentil Shepherd’s Pie
Roasted broccoli, carrots & mushroom, cheddar chive mashed potatoes
Blood orange caramel, toasted coconut cream, blood orange supremes, coconut
🍷 Pedro Ximenez Sherry, Valdespino, El Candado, Jerez, Spain nv
Confetti Cake
Passionfruit curd, fresh raspberries, sweet & salty almonds
Junto con las bebidas nos sirvieron una cesta con dos bollos con forma de magdalena con sal que en realidad eran unos Butter Rolls, unos bollitos de mantequilla salados que sirven muchas veces en los restaurantes como si fuese pan.
Aunque sabía que me iban a llenar demasiado, no pude evitar terminarlo porque estaba muy bueno.


Este fue uno de los platos que más gratamente me sorprendió por sus diferentes texturas y explosión de sabores.


Como condimento este plato incluye dos salsas, una reducción de sidra y también mostaza picante de cerveza. Además, va acompañado por tres guarniciones típicas de cocinas internacionales. Una mostarda de peras y manzanas típica de la cocina italiana, unos brotes de rábanos daikon, el rábano blanco japonés y canónigos, una planta más usada en la cocina europea.

El nombre por el que nosotros lo conocemos en España, canónigos, se debe a que durante la Edad Media eran consumidos y cultivados por los clérigos cristianos en los conventos. Y no hacían nada mal consumiendo esta hierba rica en vitamina C, hierro, potasio o ácido fólico entre otros nutrientes.
Como platos principales nos decidimos por los dos de carne, el Vanilla Brined Pork Loin y el Slowly Braised Beef Cheek.
Ambos platos eran muy consistentes y los sirven con cantidad suficiente para ser un plato único. Nos gustaron los dos, pero ambos coincidimos en que el de ternera estaba mejor.
La carrillada de ternera estofada al fuego lento estaba muy tierna y casi se deshacía. También estaba muy sabrosa y me pareció genial encontrarla servida junto con un panecillo de mantequilla crujiente, también delicioso.



Otro plato consistente con pasta, carne y vegetales lo suficientemente grande como para ser un plato único.

En cuanto a los postres, la verdad es que por un lado me sorprende no encontrar la misma variedad y calidad en los postres en estos tipos de menús, que en sus entrantes o platos principales, pero por lo que he comprobado es algo común por aquí.
De todas formas nosotros no fuimos capaces de comer nada más y sólo pudimos ver la presentación una vez emplatados, probarlos un poco recién servidos y pedirlos para llevar.
Pedimos las dos opciones diferentes que ofrecían en el menú para poder probar ambas y dar una oportunidad a la Confetti Cake, ya que no es el tipo de tarta que nos gusta a ninguno de los dos.

Como anécdota fue divertido ver la cara de Fran cuando se la sirvieron a él y a mí me pusieron la de chocolate. Les dijimos que podían servir los platos a cualquiera de los dos porque íbamos a compartir todo a medias, así que a él le sirvieron la tarta de confetti y su cara de decepción fue monumental.
Ya la había pedido en la Cheesecake Factory una vez que fuimos a cenar con unas amigas y él se empeñó en no cenar nada más que la tarta. Cuando se la trajeron no se la pudo comer, no le gustó nada y se pilló una decepción enorme después de empeñarse él en ir allí, pedir la tarta que pensaba que era la mejor de una lista enorme de deliciosas tartas. Normalmente la compartimos siempre entre los dos y la elijo yo, así que esta era su primera elección y creo que la última.
En cuanto vio la tarta de confetti otra vez, no tardó en recordar la decepción que se llevó y decirme que no quería ver esa tarta en su plato nunca más, junto con algunas de sus ocurrencias que siempre me hacen imposible aguantar la risa 😂😂
La Carmelized Coconut & Chocolate Tart en principio era la que nos llamó más la atención a los dos, más por la parte del chocolate que es una de nuestras debilidades.

A pesar de ello y teniendo en cuenta que el postre no es algo secundario para mí, este restaurante con este menú, se ha convertido en uno de mis preferidos. Sin duda una muy recomendable opción de entre todos los que he probado hasta el momento, en todos estos años que llevo visitando los restaurantes que participan en la Boston Dine Out.
El servicio fue muy correcto en todo momento y rápido, aunque dejando algo de espacio necesario entre platos. El ambiente del restaurante era perfecto, aunque como siempre algo oscuro para las fotos, pero con la nueva cámara parece que salen bastante mejor en estas circunstancias.
Hablando de fotos, como otros años volví a intentar ganar el premio que ofrecen en Instagram a la foto con más ♡ para tener la oportunidad de visitar otro de estos restaurante gratis por una vez, ya que nunca me pagan o ofrecen nada a cambio de las críticas gastronómicas y toda la publicidad que les hago en el blog. Como siempre me quedé muy lejos de conseguirlo. La foto que ganó lo hizo con más de 200 y yo apenas llegué a los 50 🙈

Así que creo que me queda otra posible visita más a alguno de los restaurantes que participan este año y ya tengo decidido cual va a ser esa opción. Por supuesto, si voy, veréis mi crítica gastronómica también aquí en A mis 30 por Boston como siempre, sin espónsor y con opiniones personales, pero sinceras.
¿Qué os ha parecido este menú?. ¿Conocíais este restaurante?. ¿Tenéis pensado ir a alguno de los restaurantes que participan en este evento?. ¿Soléis participar en los concursos de internet?.
¡Podéis dejarme vuestras opciones, sugerencias y comentarios abajo y os responderé en cuanto las lea!.
No hay comentarios :
Publicar un comentario