
Acabamos de comenzar nuestra duodécima Navidad en Estados Unidos y a pesar de todo estos años, aún encontramos planes con actividades pendientes, algunas de las que ni habíamos oído hablar antes y todas sin salir de Nueva Inglaterra.
Hace unos días por casualidad terminamos visitando y hasta participando en una de estas actividades, un evento que habían organizado en uno de los pueblecitos que forman la región de la Seacoast de New Hampshire.
Este año, como el año pasado, queríamos comprar un árbol de Navidad real, ya que mientras que no tengamos casa propia, comprar otro árbol artificial no entra en nuestros planes.
En las últimas dos casas en las que hemos vivido hemos ido reduciendo el espacio, curiosamente a pesar de estar ahora viviendo fuera de la ciudad, así que nuestras circunstancias personales nos hicieron plantearnos el año pasado comprar un árbol real.
Compartí este planteamiento y todo lo que investigué sobre ambas opciones en esta entrada del blog que podéis leer pinchando en el siguiente enlace:
🎄 Árbol de Navidad Natural Vs Artificial
Después de llegar a la conclusión de que nuestra mejor opción era comprar el árbol natural, tuvimos que buscar alguna granja que aún estuviese abierta, ya que muchas ya habían vendido todos los árboles y por lo tanto cerrado hasta la siguiente temporada.
Finalmente encontramos varias en el estado de Maine y por primera vez visitamos algunas de estas granjas de árboles de Navidad y compramos nuestro primer árbol natural.
🎄 Granjas de Árboles de Navidad de Maine
Este año pensamos en volver a visitar algunas granjas, pero hemos estado bastante liados y estuvimos dando una vuelta por zonas cercanas en las que pudiésemos comprarlo, ya que muchas Iglesias y asociaciones suelen vender también, incluso algunos supermercados.